1.20.2018

Tú si sabes quererme.

Sábado de música. Esta canción la he traído toda la semana en la cabeza. Me encanta la letra, amé la música y no puedo evitar ver una y otra vez el video. Natalia Lafourcade me ha conquistado desde sus últimos dos discos, Hasta la Raiz y este último, Musas, lleno de mucho folclore latinoamericano. En esta ocasión, se hace acompañar de Los Macorinos, quienes eran los guitarristas de base de la extraordinaria Chavela Vargas, acompañándola en los coros y con dicho instrumento de cuerdas. 

Espero esta canción los enamore como a mi, y forme parte de sus playlist favoritas.

1.17.2018

Trágame tierra y escúpeme en Cozumel



















































Pues sí. En Monterrey seguimos a -1°C, con sensación de -7°C y yo muero lentamente. El frío no es lo mío. Desearía estar en la playa. Incluso he llegado a considerar la opción de mudarme de ciudad, a una con clima más cálido, dónde no pegue tanto el frío. En octubre del año pasado, tuve la oportunidad de conocer Cozumel, una playa mexicana hermosísima. Hoy añoro estar ahí, bajo los rayos del sol, con una buena bebida y disfrutar de la vista. ¡Verano llega ya!.

Entiendo que hay que ser agradecidos con lo que la vida nos da, en este caso el frío; pero la verdad es que este tipo de temperaturas me limita y afecta en todo. Me es difícil levantarme de la cama. ¿Bañarse? Es cosa de valientes. Salir a la calle es horrible, y las casas: ¡HELADAS! Sinceramente creo que en cualquier momento aparecerá el Hombre de las Nieves a ofrecerme un helado en la sala de mi departamento.



1.15.2018

No aguanto el frio

Vivo en Monterrey, la ciudad bipolar del país (México). En un día, puede amanecer nevando para a medio día estar soleado y tener una noche lluviosa. Sí, literalmente, puedes vivir todas las estaciones en un día. En estas fechas estamos en invierno (aún) y hemos tenido días cálidos si estás directamente al sol y fríos si se te ocurre ponerte a la sombra. Mi problema es que me falta aislante. Así me dicen las personas por mi delgadez, refiriéndose a que me falta "gordura" para no padecer éste mal. A mi parecer, no creo que las personas gorditas no padezcan el frío. 27 años viviendo en esta ciudad y no me acostumbro a sus fríos gélidos calidos. Extraño los veranos de 40°C (sí, y a veces rebasamos esa temperatura)... bueno, al menos estar a unos 25-28°C, donde todo es maravilloso y no muero congelada ni tampoco acalorada. Y pues por esa falta de aislante, ahora necesito más suéteres, playeras térmicas y ropa afelpada, ya que este invierno vino más frío que los anteriores (pobre planeta) y va para largo. Mañana entra el frente frío número "ya perdí la cuenta" y espero sobrevivirlo.

Como diría Silvio Rodriguez "la primavera se demora tanto, que voy a olvidar que estuvo ayer..."

1.13.2018

Exit music for a film

Después de que Netflix me lastimara quitando How I met your mother, mi serie favorita, tuve que buscar otra serie con la cuál entretenerme en estas vacaciones de invierno. Intenté ver Friends, ya que muchas personas dicen que es lo mismo, pero ¡noooo! Ni siquiera pude terminar el primer capítulo. Sorry.

Pero llegó mi cuñada al rescate, y literal, inicié el año (sí, el 1 de enero) viendo Black Mirror. Esta serie es una antología, más bien, es la antología de historias más geniales que he visto en la historia de Netflix. Cada capítulo es diferente, no están relacionados más que por el hecho de que son futuristas, y puedes iniciar en la temporada que quieras sin problema alguno.

Llegué a un capítulo titulado "Cállate y baila". La historia está llena de adrenalina y suspenso. Y para cerrar, utilizaron una canción que no conocía del grupo Radiohead. No dudé en buscar el título de esa canción y volvera a escuchar. Y, ¡oh sorpresa! La canción tiene una letra algo fuerte, casi casi, para que en tu momento sad te cortes las venas. "...We hope that you chok" (esperamos que te estrangulen) concluye Exit Music for a film. 

La banda de Thom Yorke lanzó esta canción en 1996 para la película Romeo+Julieta, aunque ésta no fue incluida en la banda sonora de la película. En el 97, incluyó dicho tema en su album OK Computer, y ha sido utilizado en varias películas y series, incluyendo Black Mirror. A pesar de su letra melancólica y agesiva, esta canción está dentro de mis favoritas y por supuesto en mi playilst. 


1.12.2018

Córtalo

Dicen que cuando una mujer decide cortar su cabello, probablemente ha pasado algo fuerte o incluso negativo en su vida, por ello el cambio.

No siempre es así.

La verdad es que, al menos en la historia de mi cabello, nunca han sido esas las razones de mis cambios. La mayoría de las veces, por no decir que todas, lo he hecho por modas, tendencias y porque son una chica de cambios drásticos (muy drásticos).

Hace poco regresé al cabello corto. Recuerdo la última vez que mi cabello me llegó a la cintura. Tendría unos 15 años, y mi madre me acompañó al salón de belleza. Ese día cambié totalmente mi look. De una melena XL a una casi S. Jamás olvidaré a mi madre recogiendo pedazos de mi cabello y diciéndome "¡miraaaaa! ¡Tu cabello!" con una cara de dolor. El resultado final: un corte bob estilo Rihanna. (creo que sabrán cuál look es).

En fin, a partir de ahí tomé gusto por el cabello muy corto. Del bob al pixie, y viceversa. Lo más largo que aguantaba mi cabello era a los hombros. Hace un año y medio (¿o dos?) me animé a usar tonos fantasía, sí, rosa, azul, morado... Obvio en mi cabello corto. Pero hubo cambio de planes, ya que Luis y yo decidimos casarnos, entonces, quería mi cabello natural para el gran día. Además de mi cabello natural, sabía que debía dejar crecer mi cabello aunque fuera un poco para el peinado de Novia. ¡Y me fue muy difícil! Para empezar, mi cabello estaba muy procesado a causa de los colores fantasía. Así que tuve que estar con tratamientos intensivos que lo repararan. El tener el cabello muy procesado implica algunos cuidados estrictos, como evitar el uso de secadoras/planchas. Así que me aguanté. Acercándose el día, me aplicaron un color en tono natural para emparejar mi cabello (lit. lo tenía blanco) y listo. La verdad me sorprendí porque en un año mi cabello creció rapido, y pude lograr el peinado que tenía pensado para ese día tan importante. Y pues bueno, pasando la honey moon... Le pasé tijera. Sí. Regresé a mi cabello cortito (con un plus, le agregué flequillo). Y ¡lo amo!.

Ya no es tanto por moda, sino por gusto. Muchas personas me dicen que soy muy multifácetica, que todo tipo de cabello: corto, largo, café o morado, me quedan bien. Pero mi amor por el cabello corto y natural (necesitaba un respiro) no los cambio por nada. Al fin qué, al rato crece...